El Papa Francisco nos ha invitado a ser parte de un proceso muy importante que definirá el futuro de nuestra Iglesia que se llevará a cabo hasta el año 2023, llamado Sínodo de la Sinodalidad. Para entenderlo un poco mejor, empecemos con algunos conceptos que los describen.
¿Qué es Sínodo?
La palabra Sínodo viene del griego syn “juntos” y hodos que significa “camino”, expresando el camino que recorren juntos los miembros del pueblo de Dios. Es un conjunto de reuniones de los obispos de todo el mundo bajo una autoridad jerárquica que es el Papa, para discutir sobre temas de fe, moral y magisterios de la Iglesia.
Se comparten puntos de vista, información, experiencias para buscar soluciones pastorales ante una situación particular. Actúa como consejería ante el Papa en el gobierno de la Iglesia universal.
Esta figura se creó dentro del contexto del Concilio Vaticano II y a la fecha se han desarrollado 29 sínodos.
Tiene 3 fases: preparatoria, celebrativa y de actuación
- Preparatoria: donde se consulta al Pueblo de Dios sobre el tema indicado.
- Celebrativa: donde se realiza la reunión de obispos en una Asamblea
- Actuación: donde se dan las conclusiones aprobadas por el Papa y son acogidas por la Iglesia.
¿Qué es sinodalidad?
Inicia en octubre de 2021 y finaliza en octubre de 2023. la sinodalidad representa el camino a través del cual la Iglesia puede renovarse por la acción del Espíritu Santo, escuchando juntos lo que Dios tiene que decir a su pueblo.
Se realizará la fase diocesana donde participarán todas las parroquias, posteriormente pasará a las conferencias episcopales y sínodos de las iglesias orientales, luego se desarrollará la fase continental que en nuestro caso será la CELAM y finalmente irá al Sínodo de Obispos.
Se buscará responder las preguntas: ¿Cómo se realiza hoy este “caminar juntos” en los distintos niveles (desde el local hasta el universal), permitiendo a la Iglesia anunciar el Evangelio? ¿Qué pasos nos invita a dar el Espíritu para crecer como Iglesia sinodal?
Durante este proceso, lasas palabras claves a tener en cuenta son: comunión, participación y misión
- Comunión: como cada uno desde su rol aporta al discernimiento y la vivencia del llamado de Dios a su pueblo.
- Participación: Incluye la presencia de laicos, consagrados y ordenados donde hay oración, escucha, análisis, diálogo, discernimiento y consejo para las decisiones pastorales.
- Misión: Llevar este diálogo a la actitud misionera, especialmente a las periferias no solo económicas, sino espirituales, políticas, sociales y existenciales del mundo.
Así que oremos juntos para que el Espíritu Santo ilumine todo este proceso que se llevará a cabo para desarrollar el Sínodo de la Sinodalidad.
Ana Yanneth González Sáenz
Comunidad María Reina de la Paz